NSFW Anon Here. Im On My KneesExquisite. THANK YOU, THANK YOU.

NSFW anon here. I’m on my knees🧎🏻‍♀️Exquisite. THANK YOU, THANK YOU.

(I really love it when you conclude that bondage and dub-con are absolute no-go for Alucard. I just CAN’T imagine show! Alucard would ever feel comfortable doing those acts post season 3 even when he’s found the one he trusts and would spend life together with. There’s nothing wrong writing fanon smut sometimes, it’s fun, but for show canon Alucard that event is probably way too traumatic for him to ever give up total control and let someone tie him up in the bedroom. Yeah the man is chivalry to the core and all about consent, tho once they’ve passed the threshold I can see him revel in his lover giving themselves to him and letting him have his way with them however him wants, showing abit of his vampiric side🥵

Love your depiction of our favorite Dhampir. ❤️

Ah, no, thank you for that request, you glorious anon! 🥳

While I HC Alucard as being comfy switching between domming and subbing, I just can’t picture him wanting to be tied up ever as it will likely be an anxiety- and trauma-inducing experience, even if he trusts his s/o and even if they are human and/or physically powerless against him. Better not to open a can of worms or re-open a wound. I can also picture him being afraid of how he might react—he doesn’t want to accidentally frighten or hurt them if he panics or something, so better just avoid it entirely.

Ultimately, he would gleefully let s/o take the lead (this is actually exciting knowing he’s much more physically powerful and yet they are sitting on him and bossing him around like 👀🤭), but not to that extent.

Al fin me animé a escribir y publicar algo por aquí, aun no me acostumbro a tumblr, pero poco a poco lo haré, quise dejar mi aporte a Castlevania y escribir para Adrian Tepes, lo amo🥺

@milkywaydrabbles espero que te guste!

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Su luz.

Eras su luz entre toda la oscuridad que lo acompañaba.

Alucard había hecho tanto y recibido poco, había ofrecido sus conocimientos y obtenido lo peor de la humanidad, con crueldad y cinismo. 

Él esperaba ahogarse entre tanto alcohol o poder morir de una sobredosis de vino, si es que eso se podía. Ya no quería saber nada, si la humanidad le daría la espalda y le intentaría atacar en el momento que él se distrajera, entonces no quería nada.

Había logrado acabar y detener la guerra de su padre, con la ayuda de quienes se volvieron sus primeros amigos, para después quedarse otra vez solo. Y cuando parecía que la vida le daba una oportunidad para ayudar a los demás, recibió odio y traición por parte de dos humanos que creyó que se volverían sus nuevos amigos. 

Lo engañaron, lo utilizaron y vulneraron. 

Alucard se derrumbó en la miseria, no quería ni ver su reflejo porque sabía que si lo hacía, vería solo un cuerpo vacío. Un lamentable pedazo de hombre o lo que quedara de ese quién fue antes. 

Hasta que llegaste tú.

Fuiste otra desafortunada alma que se detuvo frente a su castillo. Habías sido perseguida por otros humanos, querían dañarte, querían abusar de ti.

Por eso cuando vio y comprendió todo lo que se estaba desarrollando frente a su casa, no había dudado en entrar en acción. Él no quería que alguien más se sintiera utilizado y rebajado. 

A pesar de estar resentido con la humanidad, actuó en son de la justicia y te ayudó, te salvó, rompió los huesos y advirtió a aquellos hombres que te estaban cazando como si fueras un animal de deporte.

Te permitió quedarte en su hogar, a pesar de que aún tenía desconfianza en los demás, hasta que poco a poco comenzaron a tener conversaciones, tu preguntabas y él respondía con pocas palabras.

Aquello se volvió una rutina hasta que su desconfianza se desvaneció poco a poco.

Ahora eras su compañera,  su confidente. Su amor. Su luz entre toda esa oscuridad que lo consumía.

Los primeros rayos del sol lo despertaron, casi no dormía, pero desde que estabas tú en su vida, dormir se volvió reconfortante, te vio junto a él y sonrió.

"Buenos días, cariño …" Sonreíste, te sentías observada por unos ojos miel, logrando que te despertaran.

" Buenos días, ¿Dormiste bien?…" Él sonrió, admirando tu desnudez, Alucard aun no podía creer que llegaría a estar así contigo. 

"Después de lo que hicimos anoche y quedar muy agotada, sí." Hacer el amor con él te había dejado tan fatigada que poco a poco el sueño te invadió.

Alucard rió suavemente, llevó una de sus pálidas manos a tu mejilla cálida. 

"Gracias mi amor." Murmuró el bello Damphir.

"¿ Por qué?" Lo miraste sin comprender.

"Por ser mi luz entre toda la oscuridad."

Alucard falling in love with trevors wife/finance s/o and trying to steal her away

“You’re mine and mine alone.”

The wedding was intimate, but it was a riot. Lots of music, lots of food, lots of alcohol and good company, even if it was just you and your new husband’s friends.

You all danced together and got drunk together- you had a wonderful warm feeling inside you, and every time Trevor looked at you, you felt like your heart was about t burst with love for him.

“One more dance,” he breathed into your ear, more of a purr than anything. You laughed to stifle the shiver.

“One more dance.” You agreed, letting him lead you.

Sypha was sleeping at the table, flushed from drink and exercise, and Alucard’s honey eyes were trained on the both of you. You gave him a wave.

Finally Trevor led you up the stairs to your room. All your nerves were on fire with want.

You loved this man so much.

In your room, he kissed you- and you kissed him back.

Suddenly your front was wet.

There was the taste of blood in your mouth.

Trevor died in your arms, stunned.

Alucard stood there, let you struggle under the weight of your husband.

“You are mine and mine alone.”

Al fin me animé a escribir y publicar algo por aquí, aun no me acostumbro a tumblr, pero poco a poco lo haré, quise dejar mi aporte a Castlevania y escribir para Adrian Tepes, lo amo🥺

@milkywaydrabbles espero que te guste!

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Su luz.

Eras su luz entre toda la oscuridad que lo acompañaba.

Alucard había hecho tanto y recibido poco, había ofrecido sus conocimientos y obtenido lo peor de la humanidad, con crueldad y cinismo. 

Él esperaba ahogarse entre tanto alcohol o poder morir de una sobredosis de vino, si es que eso se podía. Ya no quería saber nada, si la humanidad le daría la espalda y le intentaría atacar en el momento que él se distrajera, entonces no quería nada.

Había logrado acabar y detener la guerra de su padre, con la ayuda de quienes se volvieron sus primeros amigos, para después quedarse otra vez solo. Y cuando parecía que la vida le daba una oportunidad para ayudar a los demás, recibió odio y traición por parte de dos humanos que creyó que se volverían sus nuevos amigos. 

Lo engañaron, lo utilizaron y vulneraron. 

Alucard se derrumbó en la miseria, no quería ni ver su reflejo porque sabía que si lo hacía, vería solo un cuerpo vacío. Un lamentable pedazo de hombre o lo que quedara de ese quién fue antes. 

Hasta que llegaste tú.

Fuiste otra desafortunada alma que se detuvo frente a su castillo. Habías sido perseguida por otros humanos, querían dañarte, querían abusar de ti.

Por eso cuando vio y comprendió todo lo que se estaba desarrollando frente a su casa, no había dudado en entrar en acción. Él no quería que alguien más se sintiera utilizado y rebajado. 

A pesar de estar resentido con la humanidad, actuó en son de la justicia y te ayudó, te salvó, rompió los huesos y advirtió a aquellos hombres que te estaban cazando como si fueras un animal de deporte.

Te permitió quedarte en su hogar, a pesar de que aún tenía desconfianza en los demás, hasta que poco a poco comenzaron a tener conversaciones, tu preguntabas y él respondía con pocas palabras.

Aquello se volvió una rutina hasta que su desconfianza se desvaneció poco a poco.

Ahora eras su compañera,  su confidente. Su amor. Su luz entre toda esa oscuridad que lo consumía.

Los primeros rayos del sol lo despertaron, casi no dormía, pero desde que estabas tú en su vida, dormir se volvió reconfortante, te vio junto a él y sonrió.

"Buenos días, cariño …" Sonreíste, te sentías observada por unos ojos miel, logrando que te despertaran.

" Buenos días, ¿Dormiste bien?…" Él sonrió, admirando tu desnudez, Alucard aun no podía creer que llegaría a estar así contigo. 

"Después de lo que hicimos anoche y quedar muy agotada, sí." Hacer el amor con él te había dejado tan fatigada que poco a poco el sueño te invadió.

Alucard rió suavemente, llevó una de sus pálidas manos a tu mejilla cálida. 

"Gracias mi amor." Murmuró el bello Damphir.

"¿ Por qué?" Lo miraste sin comprender.

"Por ser mi luz entre toda la oscuridad."

Drabble Yandere alucards darling refusing to take care y/n breastfeed their newborn baby because the baby looks exactly like alucard and she just cant stand looking at her/him.

I freakn love your posts.

Trigger warning for postpartum depression and mentions of rape (non-descript)

You weren’t sure what you thought would happen when the baby was born.

Beyond Adrien’s delight and planning and excitement...you had just...waited. Children were something you were sure you’d have one day. But under these circumstances, prisoner of an obsessive dhamphir who raped you and called it love, the idea of a child had been a nightmare.

But the idea had become the fear, the dread.

You’d sit with your hand over your growing belly and close your eyes. It would grow and grow, and you had no say over it- one more thing you were helpless against.

And then you’d gone into labor. Of course Adrien knew what to do, had been preparing for it. You’d felt vulnerable and out of control and in more pain than you could imagine. You’d screamed and screamed and screamed, wanting someone to hear and come and help you.

But they didn’t.

And all you had to show for it was a captor smiling like a fool and little...fleshy thing, with his blonde hair and golden eyes blearily looking at you from his arms.

You had held it and thought is this it?

And then it had opened it’s mouth and cried.

“He’s hungry,” Adrien had laughed, and if what you had felt was nothing before, it was now emptiness. 

It was one more fucking thing that just...wanted something from you.

And...and you couldn’t do it. All you could taste was bile, rising in the back of your throat,

And you shoved the wailing thing into Adrien’s arms and threw up in your own laugh, the sound of the infant’s wailing only spurring on your disgust.

Alucard makeing his darling wear a wedding dress

You hadn’t known that Adrien was able to sew like this. You wished you’d never found out.

He was no dressmaker, of course, but he could take in a seam or let one out. And, lucky for you, you fit into Lisa’s wedding dress.

“Father kept it pristine,” he murmured, bent over the hem. You could only look at yourself in the mirror. In the corner of your eye, you could just see his golden hair. “He wanted my partner to wear it for our wedding.” He sounded so fond, you felt sick.

“Could they be married in a church?” You wondered out loud.

His laugh was warm as honey. “Of course not. But they had a ceremony. Father had this made for her.”

And it was beautiful.

She must have been so happy to have it.

How pathetic, to envy a dead woman.