Kiribaku :( - Tumblr Posts

My cuties are asleep💕
Umm… wow 😮










FUSION AU Comic not necessairly ship intended ;3
This was too much work for such a simple joke asfiashfausf but well hope u enjoy it uwu
This is the most adorable thing I’ve seen all week!

So how do we feel about mermaid au’s? 💁♀️
kiribaku doodles‼️🪨💥


Kirishima doodle bc i’m obsessed w him
he looks a bit wonky but that’s okay

trying not to draw the goat kirishima 24/7 is too hard. take a kiribaku wip for now ✌️
(i may or may not finish this idk)

kiri with his hair down always has my heart
i drew this on my friend @imaybeurmom ‘s ipad with her temu pencil so don’t hate too much ✌️
this but he IS a kiss boy (there’s no denying it)


“Katsuki… your so cool…”
“Im NOT a kissboy, Eijirou.”
And then he proceeds to kiss the boy.
Referencing this one meme going around lol


kiribaku stanley cups??!!!
might be my next big purchase

nothing like the sunshine x grumpy trope!
inspired by a fanfic i read recently on ao3! it was really cute i think the username was curdledorangejuice
i drew this in the car so it’s not my best lol

Pro hero Dynamite and Red Riot !! (they kiss on the job)

sigh i caved again and drew 3rd year/ graduated kirishima with some of my headcannons
ft- him plugging his boyfriends merch line

my absolute favorite gays in the world
(trying out ibis paint x for the first time in a while hehe)
todoroki be a loner



Beach episode sir’ Horikoshi I’m begging you
Roleplay Search
Hello there! I'm in search of more rp partners! I am not replacing any of my current ones!
I am asking for people who will roleplay canon characters from My Hero Academia, aka MHA/BNHA! I'm looking for a romantic roleplay, and can do bxb, gxg or bxg! Of course, I have limits and rules, some of which I'd prefer to speak of in chat.
As for rules I'll say now:
Don't control my character
Be at least 18 or older
Do not use * for roleplay, as I do not wrote that way
Use third person
Be at least semi lit or above
Please be decently active. I roleplay every day.
Warn me if you need to take a leave of absence that will last more than a day. I will worry/stress out if I'm not warned.
I usually like to include mature themes in my rps, so you've been warned.
If you're interested after reading this far, please feel free to interact with this post, or just dm me!
Straight up facts! Let the shippers ship and the fangirls fangirl. A ship doesn't have to be canon, just enjoy it!
"your ship will never be canon" you silly silly boi
I don't want my ship to be canon
I don't care what happens in canon
To me canon is just another fanfic that I really like
I'm here for the fanfics, the fanarts, the memes, the people and the vibe
My fav ship being canon is the last of my concern

—el Hanahaki es una enfermedad que afecta a personas con un amor no correspondido, no hay una edad en especifico donde sea más propensa a surgir, ni un sexo en especifico— el profesor explicaba con una voz monótona aquel tema como si fuera la primera vez que nos lo enseñan. Cada año sin falta metían ese tema al plan de estudios, nos lo sabíamos al derecho y al revés —Al no ser correspondidos el corazón comienza a producir una sustancia conocida como "hana-byō", al mes de contraer la enfermedad quien la padece comienza a toser pétalos de flores, a los tres meses comienzan los problemas respiratorios, a los cinco meses tallos de flores comienzan a crecer al rededor del corazón— ahí el profesor detuvo su explicación, nunca nos explicaban más allá de eso.
Alguien a mi lado levanto su mano —¿que ocurre después de los cinco meses? Nunca nos han querido explicar eso.
—ese es un tema delicado y no todos se sienten cómodos hablando de ellos, menos si alguien cercano padeció el hanahaki— todos lo miraban a la espera de que continuara con la explicación, suspiró y siguió hablando —los tallos siguen creciendo mientras aplastan lentamente el corazón e invaden otros órganos, para ese punto quien lo padece ya no puede respiran sin ayuda, sufre taquicardia por el esfuerzo del corazón en cumplir con su función, y las "mariposas en el estomago" se convierten en avispas, pierden la capacidad del habla y el dolor les impide ser racionales, se convierten en seres llenos de dolor incapaces de pensar. Algunos creen que para ese momento lo único que ronda por sus cabezas es aquella persona que no les correspondió. Al final mueren.
El salón se hundió en un profundo silencio donde el tictac del reloj se clavaba en nuestras cabezas. El hanahaki parecía lo peor que le podía pasar a las personas. Fue en ese momento cuando comprendimos el porque nos mantuvieron en secreto las consecuencias del hana-byō. No querían que le tuviéramos miedo al amor. No querían asustarnos.
—el hanahaki puede curarse con una operación, pero eso involucra dejar atrás todos los sentimientos que lo provocaron. Olvidando a la persona que amaron.
Nadie se movía, nadie reaccionaba, y el profesor solo nos veía sintiéndose culpable de todos y cada uno de los pensamientos que pasaron por nuestra cabeza.
"El amor duele"
∞∞∞
Ya había pasado un año desde que aquel profesor nos habló del hanahaki. Un año de temerle a conocer a aquella persona que se robara mi aliento y que me provocara mariposas en el estomago porque le temía a perder ese aliento y a las avispas que invadirían mi interior.
En aquella época la relación que mantenía con mis compañeros se fue alejando hasta volverse casi nula, no cruzábamos palabras, nadie se hablaba, aquellos que mantenían una relación igualmente acabaron por separarse. Todos le temían a las relaciones. Todos le temían al amor.
Luego de graduarme entré a la Yuuei, esperaba no encontrar a ninguno de mis antiguos compañeros y que revivieran esos amargos recuerdos de la secundaria. Aunque me terminé topando con una chica, aquella chica me parecía la persona más genial y masculina que había conocido. Su nombre era Mina, nos volvimos cercanos, tanto que acabamos tomando la decisión de iniciar una relación, en ese momento comprendíamos nuestros sentimientos y el hanahaki no nos preocupaba, confiábamos el uno en el otro, pero lo que creímos que era amor no era nada más que un estúpido intento de no estar solos.
Acabamos tomando caminos diferentes, nos enfocamos en nuestros estudios y pasatiempos, tiempo después dejó Yuuei para estudiar en una academia de baile. Todo terminó en buenos términos, pero el vacío en el corazón igual apareció. Sabía que ella era feliz haciendo lo que amaba y con la nueva persona que llegó a ocupar su corazón. Y yo... Yo tenía a Kaminari, el único amigo que había hecho además de Mina, y como ella, él no tardó en alejarse de igual forma cuando conoció a quien él llamaba "el amor de su vida", era tan feliz estando a su lado que no dije nada cuando comenzó a distanciarse.
—A partir de hoy tendrán un nuevo compañero... Adelante, puedes presentarte— la voz calmada y desganada del profesor fue opacada por la voz del nuevo estudiante.
—me llamo Bakugo Katsuki.
—con eso es suficiente, al fondo hay un asiento vacío.
Él camino hasta su lugar, justo al lado del mío. Miraba al suelo, caminaba algo encorvado y su uniforme estaba desarreglado, daba una muy mala primera impresión.
En todo el día no cruzó palabras con nadie, solo tomaba notas, murmuraba cosas que estoy seguro de que eran malas palabras y miraba al suelo. Para ser honesto, me daba algo de miedo.
Hay casualidades que no esperas, como encontrarte a tu ex-suegro en la tienda o llevar la misma playera que otras personas en una reunión, pero de todas esas casualidades el toparme a Bakugo mientras iba camino a casa no era algo que esperaba que sucediera. Cuando chocó su hombro con el mío imaginé cientos de escenario donde yo salía herido. Pero en lugar de eso el solo se disculpó, desvió la mirada y se dio la vuelta. Justo ahí mi percepción sobre lo que era un chico rudo y antipático cambió, no parecía alguien malo, solo era alguien marginado, asocial, distante, alguien que se parecía a mi.
Intenté mil y un cosas para acercarme a él, pero solo me ignoraba.
—hey, Bakugo...
—vete a la mierda— no cruzábamos palabras además de eso.
El tiempo pasaba, las hojas caían y el frío cubría el ambiente. El café en mis manos era lo que me brindaba calor y me salvaba de morir congelado en aquella ruidosa cafetería, que era un poco, solo un poco, más calidad que el salón de clases. Aunque en esos momentos, donde me debatía sobre seguir disfrutando mi café o seguir estudiando para los exámenes, el frío era lo de menos.
Dejé caer mi cabeza contra la mesa, no entendía nada y mi café se enfriaba.
—oye, shittyhair... ¿tu... Ehhh... Necesitas ayuda?— al sentir los toques en mi hombro y su voz llamándome levanté la cabeza, la luz de los ventanales iluminaba su cabello y hacía que sus ojos brillaran como fuego, era la calidez que quería sentir cada día, cada amanecer y anochecer. Ver esos ojos me hizo sentir calor en aquella helada mañana.
—si...
—hazme un espacio en la mesa— moví mis cuadernos, mi café y me recorrí en el asiento para dejarle el lugar.
—¿con qué tienes problemas?
—matemáticas...
—deja de susurrar, me irritas— hasta ese comentario no me había percatado de lo bajo que estaba hablando, ni de lo retraído que estaba, parecía a la defensiva esperando cualquier ataque de Bakugo, en cambio el se mostraba tan natural, sin ningún miedo ante la plática.
—lo siento, por cierto, soy Kirishima.
—me da igual. Dame tu cuaderno— pasamos toda la hora del almuerzo estudiando, era algo rudo a la hora de explicar, pero a la vez era amable.
—¿podríamos... Tu... Digo... Salida... Ehh...
—solo dilo.
—¿a la salida podemos reunirnos a estudiar?
—claro, no tengo nada que hacer luego de clases.
Nuestras reuniones continuaron volviéndose cada vez más frecuentes, ya no solo estudiábamos, pasábamos tardes enteras hablando, compartiendo nuestros intereses y volviéndonos más cercanos. Las tardes frías eran cálidas a su lado.
Bakugo era el fuego ardiente que llegó a iluminar mi vida, quien llegó a sacarme de la soledad y quien me hizo dejar el miedo al amor en el olvido. Ya no le temía al hanahaki. Ya no le temía a mis sentimientos. Ya no le temía a Bakugo.
Cada vez que me miraba, cada vez que me sonreía, cada vez que escuchaba su voz la calidez en mi corazón crecía y las mariposas se multiplicaban. Quería permanecer a su lado para toda la vida.
—¿quieres ir a una fiesta?
—¿tu vas a fiestas? Creí que odiabas esas cosas.
—es el cumpleaños de un amigo o algo así, estoy obligado a ir y si tengo que ir prefiero que este alguien que si me agrade en la fiesta.
La fiesta fue un sábado, aún recuerdo el olor de la loción de Bakugo, el color de su camisa y su cara de fastidio al ver a todos los invitados. Se refería a cada uno con apodos, hasta a su amigo, quien cumplía años, lo llamaba por un apodo y no por su nombre.
—hola, Kacchan— ¿kacchan? —creí que no vendrías, no te gustan las fiest...
—cállate maldito nerd de mierda, yo no quería venir.
—Bakugo, no seas tan grosero.
—no te metas, Kirishima.
Hace tiempo había dejado de llamarme "shittyhair", había ganado su confianza y había conseguido que me viera como un igual y no como alguien inferior a él.
—¿Kacchan, quién es él?— cuestionó el chico peliverde, era un poco más pequeño que Bakugo y que yo, me veía con curiosidad.
—él es Kirishima.
—nunca habías traído a algún amigo... Creí que no llamabas a nadie tu amigo... Él... ¿es tu... Es... Tu novio?
—no— seco, frío, cortante. Ese "no" me devolvió a la realidad, una donde no era realmente alguien tan importante para Bakugo, donde no podía ver su rostro cada mañana y donde mis sentimientos no eran correspondidos —¿porque saldría con alguien? Las relaciones son pura basura.
—si Kacchan, lo siento— el chico tiró de las mangas de su playera, parecía temerle a Bakugo pero aun así quería acercarse a él, y por más que Bakugo se mostrara a la defensiva no lo alejaba. Eran cercanos.
Me sentía incomodo, nadie al rededor estaba prestando real atención a nuestra conversación. Parecían acostumbrados a que eso sucediera. Todos conocían la relación entre Bakugo y ese chico. Y Bakugo no les había hablado sobre mi, ni a mi me mencionó algo sobre su vida social, pero... ¿porque debía de hacerlo?, no era realmente especial para él, solo era un amigo más. Un amigo al que ocultó de los demás.
—Kirishima, quita esa cara de idiota. Llevas buen rato viendo a la nada.
—solo estaba pensando.
—¿tu piensas?
—¡oye! ¡yo si pienso! No soy tan tonto.
—¿así que si eres algo tonto?
—noo... No es a lo que me refería.
El ambiente entre Bakugo y yo había vuelto a la normalidad. ¿que más daba si el no correspondía a mis sentimientos? ¿que importaba si era cercano a otras personas? No podía exigir que fuera única y exclusivamente para mi. No podía decir que era mío.
El resto de la fiesta fue un poco más relajado que la bienvenida, Bakugo seguía irritándose cada que alguien además de mi le hablaba y yo conocí a algunas nuevas caras, aun no podía llamarlos amigos, sería raro. Pero por una vez no éramos solo Bakugo y yo. No éramos las únicas voces que interrumpían nuestros silencios. No estábamos solos.
Podía confiar en que si nos separábamos por cualquier razón el no estaría solo, sabía que ese chico peliverde no lo abandonaría. Ese chico lo apreciaba lo suficiente como para hacerme entender que no era la única persona en la vida de Bakugo, pero por como estábamos las cosas, Bakugo era la única persona en mi vida.
Pensé sobre lo que había vivido con Bakugo, los últimos meses de conocerlo, sobre la fiesta y sobre mi corazón. Sabía que de seguir con estos sentimientos el hanahaki podría aparecer. Claro que lo sabía y no haría nada al respecto. No tenía la certeza de que el hanahaki apareciera, pero de ser así sabía que no me sometería a la operación, no podía olvidar algo que era tan importante para mi. No podía olvidar esa sonrisa, ese desordenado cabello y esos ojos de fuego.
No permitiría que de mi corazón fuera arrancado el amor que sentía, el amor me hacía feliz. Tan feliz que dejaría que la muerte llegase, me arrancara de esta vida y me dejara en un vacío, una oscuridad, un olvido, porque sabía que de morir en ese momento moriría feliz por el amor.
Y como esperaba, los pétalos no tardaron en aparecer, no dolía al toser, solo era incomodo. Intenté lo más que pude el ocultar los pétalos de Bakugo y de mi familia. Intente hasta que se volvió una tarea imposible, los pétalos me ahogaban, el dolor inició y las avispas llegaron.
Dejé de ir a clases, mis padres se preocuparon al enterarse de mi hanahaki, pero les dejé en claro que no quería la operación, no quería volver a esa tristeza, a esa soledad. No podía permitirme olvidar.
Se me dificultaba respirar, sentía una gran presión en el pecho y los pétalos seguían invadiéndome. Dejé de ver tan seguido a Bakugo, hablábamos por mensaje y le repetía constantemente que estaba bien, pero en el fondo sabía que el no me creía aunque me negaba a aceptar esa realidad, una realidad donde Bakugo se preocuparía realmente por mi.
Había perdido la cuenta del tiempo que estuve sintiéndome tan mal, dejé de comer, me era imposible, los tallos impedían que hablara. Tiempo atrás de habían hospitalizado, necesitaba de constante atención médica para evitar la mayor parte del dolor. Y lo único bueno de esa situación es que después de tanto tiempo, tantas noches de dolor y desvelo, tanto sufrimiento, por fin había vuelto a ver esos ojos de fuego, opacados por la preocupación.
—¿porque no me lo dijiste?— la impotencia en su voz quemaba —¿porque insististe en que estabas bien aunque estabas muriendo?— tras cada palabra su voz se elevaba —¡¿porque no aceptaste la operación?! ¡¿porque?!— lagrimas recorrían sus mejillas y apagaban el fuego de su mirada.
Moví los labios, esperando que lograra entenderme, anhelando que mis palabras me liberaran de esa presión que sentía, no la presión de los tallos, la presión de mi mente, la presión por decirle la verdad a Bakugo, la presión por sentirme liberado.
"Te amo, Katsuki"
Parecía sorprendido, ya no sabía si lo que veía era real o no, solo esperaba que realmente me entendiera. Decir esas palabras liberó esa presión que sentía, esos sentimientos que tenía atrapados, esa verdad que me quemaba.
Vi sus ojos, mientras todo se ponía negro, sabía que todo terminaría, moriría siendo feliz al ver por última vez sus cabello desordenado, sus ojos ya no tan brillantes y sus labios susurrándome —también te amo— vida pétalos saliendo de su boca, pétalos que indicaban que hacía no mucho el hanahaki había aparecido en él.
Y con esos pétalos todo se volvió negro. Todo había terminado. La muerte me había arrebatado del lado de Katsuki.
No me gustó del todo la narración en algunas partes, pero estoy conforme con la historia.
Matar personajes es mi pasión.
Tomen awa y duerman bien.


Ha sido mucho el tiempo que paso desde la ultima vez que escuche su voz, comencé a olvidar aquel maravilloso sonido que salía de su boca cada que me susurraba al oído "te amo".
Estuve fingiendo estar bien tanto como pude, grité que no me importaba cuando por dentro la frustración me quemaba. Aguante todo lo que pude hasta que me derrumbé, me sentía devastado, me sentía como un inútil y me sentía débil. Pero lo que mas me dolió fue ver a Kirishima esforzándose tanto por mantener nuestra relación que pendía de un hilo cuando yo no ponía nada de esfuerzo.
"No importa que ya no lo escuches, seguiré diciendo 'te amo' mil veces más hasta que te sientas listo de decírmelo tan siquiera una sola vez"
Ya no podía protegerte, ya no podía ser ese héroe que cuidara de ti, ni ser el héroe numero uno. Era imposible.
¿quien se quedaría con una persona que no te demuestra que te ama realmente?, ¿quien se quedaría con alguien que no te puede proteger?, dime ¿quien daría todo de si sin recibir nada? Ni una sonrisa, ni un te amo. Dímelo, ¿quien haría eso?
"Se que aun no estas listo para hablar sobre eso, no te presionare ni nada por el estilo, eso no sería masculino"
Me odiaba por no poder decirle todo lo que sentía. Por no tener el valor de desahogarme con él. Por ignorar los gritos de mi corazón que lo llamaban a cada segundo.
Fueron tantas las noches en que intente llamarte, donde cada que estaba a punto de hacerlo me arrepentí. Y se que el solo espero por esa llamada que nunca llegó, se que se quedaba despierto hasta altas horas de la noche vigilando su celular en espera de una llamada, un pensar o una solo señal de que yo estaba ahí.
Pero yo no estaba ahí para él, dejé que nos derrumbáramos como estatuas al pasar el tiempo, cree un muro invisible entre nosotros y me aislé de todo. Desde que el accidente ocurrió me había alejado de todo, de todos, no tuve el valor de enfrentar mis problemas de frente y solo hui de ellos
Justo por eso me pregunto hora que me he quedado solo el que habría ocurrido de haber tenido el valor de desahogarme contigo, de contarte sobre todo eso que rondaba por mi cabeza y no me dejaba en paz. Me pregunto si estarás bien, si haz mejorado con el uso de tu quirk, si te estas divirtiendo.
Yo no estoy bien, te necesito. Ahora tengo miedo, y no estas aquí para protegerme de lo que me atormenta.
Solo quiero volver a escuchar tu voz diciéndome lo mucho que me amas y quiero que por primera vez en todo este tiempo que he desaparecido me escuches decirte lo mucho que te amo.
Es un sueño imposible, ya no podré escuchar tu risa, ni tus quejas por no entender matemáticas o tus gritos de emoción cada que encontrabas nueva mercancía de Crimson Riot. Ya no puedo escucharte. Ya no escucho nada.
Ya no escucho. Ya no más.
Si ese maldito accidente no hubiera ocurrido yo no estaría sintiéndome miserable ahora mismo, habría podido ir a esa cita que te prometí aquella tarde y te habría dicho, fuerte y claro, todo lo que sentía por ti. Todo lo que siento y seguiré sintiendo.
Porque te amo, Kirishima Eijiro.
Aunque ya no pueda cumplir ese sueño de destruir a los villanos estando a tu lado.
Aunque ya no pueda ser el héroe numero uno.
Aunque no me sienta capaz de decírtelo de frente.
Aunque me duela el olvidar tu voz.
Te amo.
∞∞∞
Eran pasadas de las 3 a.m., mis ojos ardían y el sonido del reloj seguía clavándose en mi cabeza tras cada tic-tac.
Mi celular sonó con aquella canción que solía escuchar cada tarde con Katsuki, me quede viendo la pantalla por unos segundos, aguantando la respiración por la sorpresa y conteniendo las ganas de gritar.
El apodo que le había puesto hacía bastante tiempo a Katsuki se iluminó en medio de la pantalla, sin dudar respondí a su llamada.
—no... No creí que responderías. Realmente lo siento Eijiro, lo siento mucho. Yo no quise desaparecer... No así... No de ti... No me sentía preparado para afrontar todo esto, aun no creo estarlo, pero necesitaba hablar contigo— su rostro vaga me te iluminado se veía en la pantalla, ese no era el Bakugo que recordaba, se veía cansado, con ojeras y los ojos llorosos, se veía vulnerable —yo... Yo te...
Moví mis manos, deletreando cada letra de lo que intentaba decirle, con las señas mal ejecutadas y con la esperanza de que lo entendiera —no necesitas decirlo, lo sé.
—Eijiro...
—te amo.
Esto inicio como una historia muy bonita de amor pero pues meterle cosas drásticas es mas chido. Ni siquiera se si se entiende la frustración de Kacchan, para mi si tiene sentido.
Kacchan herido emocionalmente me agrada porque así puedo sentirme miserable junto a él.
Tomen awa, duerman temprano (ignoremos que termine de escribir esto a las 3 am, no sean como yo) y no se proyecten en personajes 2D, eso no está chido.




❤️🧡
KiriBaku Week 2021
Day 1. Steampunk
Day 2. Gender bender
Day 3. Wedding